"Lo más importante que me llevo es la aceptación total: hacia mí y hacia los demás. Sentí una conexión profunda con mi verdadero ser. Me ayudaron a abrir mi corazón y a recibir amor, luz y verdad. Si tienes dudas, escucha a tu corazón. Esta experiencia transforma de verdad."

"Llegué sin saber meditar, con hábitos caóticos y salgo con una sensación de ligereza que no conocía. Dormí como hace años no dormía, me sentí guiado con cariño y sin máscaras. Aquí todos somos iguales. Fue una experiencia poderosa y sencilla, hecha desde el corazón. Esto no es cualquier retiro: es una casa espiritual."

"Vine muy rígido, mental y analítico. Aquí entendí que no soy mis pensamientos. Pude soltar el control, sentir y abrirme a lo experiencial. Me ayudaron a dejar de identificarme con la mente y empezar a vivir desde el ser. Este retiro te conecta contigo, con los demás, y con la verdad que ya eres."

"Llegué llena de miedo, juicios y dudas. Me voy con el corazón lleno. Encontré una familia, una guía amorosa y una transformación profunda. Estas fueron vacaciones conscientes, sí... pero también vacaciones con amor incondicional. Nunca imaginé que un retiro pudiera tocarme tanto."